De todas las políticos españoles, Aguirre ha sido la que con mayor prontitud ha aceptado su cargo para participar en las reuniones del Club de Bildelberg, una institución que merece mención aparte. De cariz masónico, Bildelberg es una sociedad secreta que celebra reuniones secretas, y a las que sólo invita a VIPS por razón de cargo. Por decirlo de otro modo, invita a personas en la cumbre de su carrera política. ..
Hispanidad.com hace este interesante comentario de la popular Esperanza Aguirre, presidenta de la comunidad de Madrid del que tomamos las siguientes notas. De todas las políticos españoles, Aguirre ha sido la que con mayor prontitud ha aceptado su cargo para participar en las reuniones del Club de Bildelberg, una institución que merece mención aparte. De cariz masónico, Bildelberg es una sociedad secreta que celebra reuniones secretas, y a las que sólo invita a VIPS por razón de cargo. Por decirlo de otro modo, invita a personas en la cumbre de su carrera política. Bildeberg, según la investigación de Ricardo de La Cierva (La Masonería Invisible, 2002), es la delegación europea del Council of Foreing Relations (CFR), el más importante grupo masónico norteamericano, cuyo impulsor en todo el mundo fue John D. Rockefeller (junior), y hoy es el ex secretario de Estado norteamericano, doctor Henry Kissinger Los norteamericanos consiguieron que el príncipe Bernardo de Holanda se convirtiera en la cabeza visible de Bildelberg y sus sonadas reuniones (que no tenidas). Pero ocurrió que el buen príncipe se vio inmerso en el escándalo de la Lockeed, y a los masones no les gustan los escándalos. El que cae en desgracia debe olvidarse de tan selecto club, aunque pertenezca a la Casa Real más rica del mundo, aún más que la dinastía británica. Bildelberg funciona en paralelo con la Comisión Trilateral, donde los Rockefeller y Kissinger también tienen algo que decir, aunque es verdad que el Foro de Davos (también trufado de masoncetes multimillonarios) le está arrebatando el protagonismo entre la casta de los ricos pensantes. La Comisión Trilateral fue fundada en 1973 por David Rockefeller grado 33 de la masonería: el máximo grado que se puede alcanzar. El elenco de los españoles que han participado en las muy secretas reuniones de Bilderberg es muy reducido. Por ejemplo: la Reina Sofía, Joaquín Almunia, Enrique Barón, Juan Luis Cebrián, Guillermo de la Dehesa, Carlos Ferrer Salat, Francisco González (entonces presidente de Argentaria), Rodrigo Rato, Matías Rodríguez-Inciarte (vicepresidente del Santander Central Hispano), Narcís Serra, Javier Solana, Pedro Solbes, Federico Trillo (sí, Federico Trillo), Emilio Ybarra, etc. El objetivo de las reuniones es, principalmente, hacer una buena agenda de teléfonos para pedir favores. Los políticos se sienten en su salsa rodeados de tanta elegancia, y los promotores aprovecharán tanto la agenda de los políticos como la de los banqueros, para hacer una llamada cuando lo necesiten. Pues bien, ¿saben ustedes cuál es el político español que más veces ha participado en los saraos de Bildelberg? Esperanza Aguirre (años 98, 99 y 2000), con el PP en el poder y en calidad de ministra de Educación, uno de los temas que más absorben y obsesionan a los masones. Recibió con todos los honores a los participantes en el Congreso Mundial de la Masonería, celebrado en España; y esto ya es más grave, porque hablamos de masonería europea, rama francesa y escocesa, que, comparado con sus colegas norteamericanos, es Mucho más sectaria. En una foto que extrañó a más de un dirigente popular, doña Esperanza se dejó fotografiar con los del mandil, a los que recibió en el Senado por todo lo alto
