6/06/2011

La Reina, Polanco, Cebrián y Solana, “pillados” en la reunión de los Bilderberg 2010

La Reina, Polanco, Cebrián y Solana,
 
 
La Reina Doña Sofía, fotografiada en el momento en el que abandona el hotel en el que tuvieron lugar las reuniones del Club (ESTULIN).

La Reina, Polanco, Cebrián y Solana, "pillados" en la reunión de los Bilderberg

Aunque buscan la confidencialidad y la mayor discreción posible, se había filtrado casi todo de la reunión que el Club de los más poderosos del planeta, los Bilderberg, celebraron hace dos semanas en Sitges. Se supo, por ejemplo, y con mucha semanas de antelación el lugar elegido, el exclusivo hotel Dolce, convertido en un auténtico búnker durante los cuatro días del cónclave, y hasta la lista de los selectos invitados, poco más de un centenar. Pero faltaba la prueba irrefutable de lo acontecido, las imágenes y fotografías que dan fe de la capacidad de convocatoria de uno de los grupos más secretos, objeto del mayor número de teorías conspirativas, y, para muchos, un auténtico gobierno mundial en la sombra. 

Medios de comunicación de España y de todo el mundo se apostaron sin éxito en las inmediaciones del hotel en un intento frustrado por conseguir las imágenes de algunos de los invitados VIP que asistieron al encuentro. Algo casi imposible visto el denuedo con el que los 350 Mossos d'Escuadra desplazados cortaron todas las entradas al recinto en un perímetro que no dejaba acercarse a menos de medio kilómetro del hotel. Pero solo un fotógrafo, que no quiere desvelar su identidad, ha logrado la hazaña de capturar en más de 600 imágenes la salida, el domingo día 6 de junio, de los asistentes. Tomadas a cien metros de la entrada principal del complejo, las imágenes que hoy reproduce El Confidencial han sido difundidas por la página web personal del periodista e investigador Daniel Estulin, uno de los hombres que más conoce las interioridades del Club Bilderberg, asunto al que ha dedicado la mayor parte de su vida y sobre el que ha escrito dos libros de investigación y una novela publicada muy recientemente, Conspiración Octopus

La nutrida representación española estuvo encabezada, como es tradicional, por la Reina Doña Sofía que, ese mismo domingo, acudió a presenciar en Paris, ya por la tarde, la quinta victoria de Rafa Nadal en el torneo de Roland Garros. De hecho, la imagen de la Reina es de las poquísimas que se han conseguido obtener de Doña Sofía en los muchos años que ha participado en los encuentros del Club, pues hasta el momento solo se le había podido retratar en la otra edición que tuvo lugar también en España, en 1989, en el balneario de La Toja. CIta a la que, entonces, acudió acompañada por el Rey Don Juan Carlos. Como ella misma le explicó recientemente a la periodista Pilar Urbano, estos encuentros siempre le han parecido "apasionantes". Fue precisamente en la reunión de 1991 en Baden-Baden donde pudo conocer, por ejemplo, a Bill Clinton cuando éste todavía era gobernador de Arkansas. "Allí nadie es reina ni canciller ni presidente de gobierno o chairman de una multinacional... Allí no hay rangos", ha señalado. No se toman "decisiones políticas, económicas ni defensivas" pero "vale la pena asistir por la información que allí circula, por la visión más rigurosa y más completa de ciertos conflictos que nos afectan o nos afectarán". 

Doña Sofía compartió confidencias en Sitges, entre otros, con la Reina Beatriz de Holanda, cuya familia pertenece al Club desde sus orígenes, pues fue su padre, el Príncipe Bernardo de los Países Bajos, el promotor de las reuniones junto con el consejero político de origen judío Joseph Retinger. De hecho, el Club toma su nombre del lugar elegido por ambos para su primera conferencia secreta, en 1954, en el Hotel Bilderberg, cerca de Arhem.

Zapatero acudió con Bernardino Leon

Este segundo encuentro de los Bilderberg en España ha contado con más españoles que nunca y ha servido para que José Luis Rodríguez Zapatero transmitiese a los más poderosos un mensaje de confianza sobre la economía de nuestro país. Pronunció un discurso de bienvenida a todos los asistentes como jefe de Gobierno del país anfitrión y estuvo acompañado por su secretario general de la presidencia y ministro de exteriores en la sombra, Bernardino León. De ambos no hay, sin embargo, testimonio gráfico, seguramente porque ninguno de los dos fue invitado a quedarse durante las tres jornadas de reuniones y solo compartieron unas horas con el resto de los asistentes. 

De quien sí ha se podido obtener una imagen robada es de otro de los españoles cuyo nombre más veces ha aparecido ligado a las reuniones del Club, el consejero delegado del Grupo PRISA, Juan Luis Cebrián. Le acompañaba en esta ocasión Ignacio Polanco, presidente del Grupo e hijo del ya fallecido Jesús Polanco, otro de los hombres que en su día tuvo derecho a codearse con la élite más influyente del Club.   

Las cerca de 600 imágenes expuestas por Estulin en su página web muestran la salida del hotel de numerosas personalidades, pilladas in fraganti cuando se despiden hasta el año que viene de sus compañeros. El fotógrafo que las ha conseguido permaneció tumbado en el suelo durante nueve horas para retratarles. Así, se puede ver al socialista Javier Solana, ex secretario general de la OTAN y ex jefe de la diplomacia europea charlando con otros asistentes mientras deposita su equipaje en el coche oficial que le espera a las puertas del recinto. Al fondo, un concurrido hall lleno de personalidades en las que, en otra imagen, se adivina la silueta del vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Competencia, el también socialista Joaquín Almunia

La delegación española presente en Bilderberg, los elegidos para representar a nuestro país ante los más influyentes, se completa con otros nombres de no menor poder (VER ÁLBUM). Entre ellos, César Alierta, presidente de Telefónica, Ana Patricia Botín, presidenta ejecutiva de Banesto, Jaime Carvajal Urquijo, director general de Advent International, Gustavo Cisneros, presidente y CEO de Grupo Cisneros, José María Entrecanales, presidente de Acciona, Juan María Nin, director general de La Caixa y Matías Rodríguez Inciarte, vicepresidente ejecutivo del Banco Santander.